SOFISTICADO Y TRANQUILO, SITUADO EN CALA JONDAL, CONOCIDO POR SU EXCELENTE GASTRONOMÍA DE CALIDAD Y SU UBICACIÓN EXCEPCIONAL.
MORE THAN JUST A BEACH RESTAURANT, TROPICANA IS A VIBE
Quiénes somos
SITUADO EN CALA JONDAL, TROPICANA ES EL LUGAR PERFECTO PARA DISFRUTAR DE UN AMBIENTE TRANQUILO.
Tropicana Ibiza fue inaugurado en mayo de 1988 en Cala Jondal: un lugar en el que la naturaleza aún se mantenía intacta y tan solo los locales isleños conocían. Hoy, la cala sigue siendo un lugar privilegiado que conserva su encanto gracias a su entorno natural entre pinos, montañas y colinas vírgenes, convirtiéndose así en la localización perfecta para desconectar de tu rutina diaria. Tropicana invita a venir, a disfrutar, pero sobre todo, a alejarse de la rutina para acercarse al mar y saborear la vida de chiringuito.
En 1987, Cala Jondal era uno de los enclaves más vírgenes de la costa ibicenca. Salvaje y recóndita, la cala conserva hoy en día ese paisaje exuberante repleto de pinos, colinas y montañas.
El acceso a Jondal era entonces un camino de “carros”. Fue en ese momento cuando Toni Marí, propietario de Tropicana, decidió ofrecer este paraíso a aquellos que buscan tranquilidad y lugares únicos. Un año de trabajo hizo falta para acondicionar la playa, respetando con mimo su naturaleza virgen y su entorno.
En 1988 abrimos las puertas al público, convirtiéndonos en el primer Beach Club de Ibiza. Mantenemos la esencia desde 1988 hasta el día de hoy. Empezamos con unos 15 trabajadores, y a día de hoy somos una familia de más de 50.
Un negocio familiar con una filosofía responsable, ética y de confianza. Y los responsables de que esto sea así a día de hoy, son Juan Carlos y Maribel. Los hermanos Marí llevan años honrando el legado de Tropicana y perpetuando la receta de su éxito: quien viene a Tropicana, repite. Para los hermanos, Tropicana es mucho más que un restaurante, es un tributo a su amada isla, a sus orígenes.
Así, con mucho mimo, respetando al máximo el entorno natural de este paraíso, Juan Carlos y Maribel, acompañados de su equipazo de profesionales, logran que cada día Tropicana sea un lloc molt polit.
Es por eso que cuando nuestros clientes se marchan, nunca es un adiós sino un hasta pronto, porque siempre nos volvemos a ver en Tropicana.
